Reduzca el número de perforaciones al localizar fugas de gas natural
Los procedimientos operativos y las normativas de todo el mundo obligan a realizar perforaciones de barrenos cada vez que se detecta una presunta fuga de gas natural, con el fin de localizarla y clasificarla. Sin embargo, las perforaciones innecesarias pueden evitarse, o al menos reducirse, utilizando el equipo adecuado. Esto ahorra mucho tiempo a los operarios de perforación. También reduce los costes de los cierres de carreteras y las reparaciones o sustitución innecesarias de carreteras pavimentadas.
¿Por qué hacer agujeros?
Cuando un operador es llamado a una situación de respuesta de emergencia o realiza una inspección de fugas y encuentra una fuga, ésta debe ser cuantificada y clasificada para determinar si la fuga debe ser reparada inmediatamente o sólo monitorizada.
La mayor concentración encontrada con los métodos tradicionales, detectando en la superficie, no guiará necesariamente al operador hacia el lugar más probable para iniciar la perforación de la barra. La superficie del suelo, las formaciones de grietas o incluso las condiciones del subsuelo podrían generar escapes de gas muy alejados de la posición real de la fuga. Por ello, se introdujo el método del barreno, el cual consiste en medir a una profundidad definida por debajo de la superficie del suelo, para garantizar las mismas condiciones en cada uno de los puntos de medición.
Reducción significativa del número de perforaciones con IRwin y sus accesorios
El detector de fugas de metano IRwin®, en combinación con la sonda de campana original de INFICON, es capaz de extraer altas concentraciones de metano a través de la mayoría de las superficies creando un vacío. Esto permite realizar un sondeo previo significativamente más rápido para guiar al operario hasta el lugar más probable para iniciar la perforación.
Normalmente, la superficie se sella cuando la sonda de la campana se presiona contra el suelo con la mano o, preferiblemente, añadiendo el peso del cuerpo del operador a la superficie exterior de la campana. El comportamiento normal del instrumento es un aumento inicial de la concentración a medida que el gas que se encuentra en la superficie (o cerca de ella) se introduce en el instrumento. Al cabo de unos segundos, la concentración suele estabilizarse o incluso disminuir. Esto se debe a la disminución en la concentración de la sonda y en la estructura superior de la superficie.
Transcurridos unos segundos más, las concentraciones comienzan a aumentar a medida que el vacío empieza a arrastrar el gas a través de la superficie y hacia el interior del instrumento. Dependiendo de la concentración bajo el suelo, los valores del instrumento pueden aumentar durante veinte o treinta segundos hasta que empieza a saturarse. Cuanto más lisa sea la superficie, como las zonas peatonales pavimentadas, mejor funcionará. Los niveles de volumen por ciento o incluso decenas por ciento son bastante comunes.
Este método de detección sin agujeros se realiza fácilmente en grandes superficies en pocos minutos. La perforación con barra suele reducirse a una zona muy pequeña y sólo requiere unos pocos agujeros de barra para determinar con precisión la ubicación de la fuga real.
Ventajas de reducir las perforaciones
Poder limitar el número de agujeros de la barra tiene varias ventajas. En primer lugar, reduce significativamente el tiempo empleado en romper la superficie y reparar los agujeros. Además, si la presunta fuga se encuentra en una zona urbana congestionada o si la estructura por encima y por debajo del suelo es compleja, detener o desviar el tráfico puede resultar costoso y molesto.
Deben tomarse todas las medidas posibles para mejorar la eficacia y la seguridad de los operarios, y la localización eficaz es una de ellas.
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