De la megaciudad al microestado

Los especialistas en ingeniería de aplicaciones son escasos  y, por tanto, no son fáciles de encontrar. Así que INFICON buscó internamente al mejor candidato para que aceptara la oferta de un entorno de trabajo emocionante e innovador, lleno de impresionantes paisajes montañosos en el corazón de Europa. No fue una decisión fácil de hacer para Mitsunori Tamura, de nuestra oficina de Japón, pero al final tuvo el coraje de cambiar su entorno habitual por algo completamente diferente.

Las diferencias entre Japón y Liechtenstein no se limitan al tamaño de las ciudades o al paisaje, sino que también son especialmente evidentes en la vida social y cultural. La vida laboral en Liechtenstein es mucho más abierta y menos restrictiva, mientras que en Japón se hace hincapié en el rigor y la precisión. Mitsunori aprecia la atmosfera de "mente abierta" y que todo el mundo hable con confianza y disfrute de un ambiente de trabajo positivo. Además, el entorno internacional crea retos apasionantes al trabajar con gente de todo el mundo.

El tiempo vuela. Ya han pasado cinco años desde que Mitsunori hizo las maletas y se lanzó a la aventura. Incluso después de todo este tiempo, sigue fascinado por la naturaleza de la región, así como por su lugar de trabajo en Balzers. Sólo hay dos cosas a las que aún no ha podido acostumbrarse: El idioma suizo alemán y los inviernos oscuros.